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La "cabaña del pescador" es una encantadora casa situada frente al hotel. Extremadamente cómoda y bien equipada, ofrece total independencia para unas vacaciones en familia, una reunión con amigos o una despedida de soltero, por ejemplo. Con dos dormitorios, una sala de estar (con sofá cama) y una cocina americana, esta "cabane" es perfecta para quien quiera disfrutar de la isla y de esa sensación embriagadora de un paraje de verdor, agua y cielo azul, reparador y rejuvenecedor. Y nada le impedirá aprovechar todos los servicios que ofrece el hotel: restaurante, talaso-spa, servicios VIP...
En el jardín, sólo tiene que seguir el pequeño sendero hasta la playa privada. O tome el camino sombreado al lado del hotel. Allí, al borde de la laguna, rodeada de vegetación, se encuentra la Casita de la Playa. Esta "casita en la playa" acoge a familias o grupos de amigos para estancias únicas con los pies en la arena. Con sus 3 dormitorios, su cocina totalmente equipada y su gran terraza, esta villa le permite disfrutar de la isla de una manera diferente, con total libertad. Los grandes ventanales dan directamente a la laguna, al pantalán y a los barcos amarrados... Un auténtico ambiente meridional, auténticamente mediterráneo.
A dos pasos del puentecito de madera, la Villa de la Presqu'île es una casa mediterránea ideal para pasar un rato en familia o entre amigos, antes de ir a pasar la tarde a la playa (a cinco minutos) o de descubrir el departamento y su rico patrimonio (viñedos, edificios, naturaleza y paisaje, lugares culturales, eventos...). La casa, decorada con gusto, dispone de 3 habitaciones (hasta 6 personas).
Para que su estancia en las villas sea lo más cómoda y agradable posible, L'Île de la Lagune pone a su disposición:
juegos de mesa, accesorios para bebés, una bodega bien surtida, una cafetera espresso, té y cubitos de hielo, una cámara Polaroid para llevarse encantadores recuerdos de época...
Las villas son el lugar ideal para reunir a amigos y colegas con motivo de una despedida de soltero, una conferencia en el departamento, etc. Todos se reúnen en el mismo lugar para disfrutar del sitio, los servicios y la intimidad.
Los residentes de las villas tienen acceso a la piscina del hotel para tomar el sol y refrescarse, y pueden coger el barco lanzadera a la playa de Saint-Cyprien.
